Para pulir trofeos, es importante tener en cuenta que el metacrilato necesita de un cuidado mínimo. La limpieza suele ser bastante sencilla pero hay que tener cuidado con los productos que se utilizan para no dañarlo ni rallarlo. No es recomendable el uso de elementos como las esponjas o tipos de detergentes que sean algo abrasivos como los limpiacristales, disolventes o aquellos que contengan entre sus elementos algo de alcohol. Para una correcta limpieza y mantenimiento de trofeos, es recomendable el uso de un paño suave de algodón. Podemos mojarlo ligeramente y agregarle un poco de jabón neutro si tiene mucha suciedad. Aunque no se le eche jabón, es mejor que el paño esté algo mojado para que no cause inconvenientes y no llegue a dañar el material. En el caso de querer eliminar únicamente el polvo que hay en el trofeo, con el paño humedecido será más que suficiente. Si se le quiere quitar algún otro tipo de mancha como puede ser un adhesivo, lo ideal es tener el paño humedecido pero añadiéndole un poco mínimamente de alcohol.