Muchos expertos coinciden en que los revólveres son una excelente opción para quienes se inician: son simples, robustos y fáciles de usar.
Las pistolas semiautomáticas ofrecen mayor capacidad de carga y velocidad, aunque requieren más práctica para su manejo.
También puedes considerar las carabinas o escopetas, ideales para ciertos usos en exteriores.
Para defensa personal, suelen recomendarse armas ligeras, fáciles de manejar y con respuesta rápida, como algunas pistolas semiautomáticas compactas o revólveres de calibre reducido.
Si tu interés está en el tiro deportivo, la precisión y el control del retroceso serán clave.
Para la caza, deberás valorar el entorno, el tipo de presa y el alcance necesario: desde escopetas para caza menor hasta rifles específicos para caza mayor.
Entre los calibres más adecuados para principiantes destaca el .22 LR, por su bajo retroceso y coste reducido.
El 9 mm también es una elección muy extendida gracias a su potencia equilibrada.
En el caso de los revólveres, el .38 Special ofrece un disparo suave y controlable, perfecto para quienes se están iniciando.
Antes de decidirte por un modelo, es muy recomendable acudir a un campo de tiro y probar diferentes armas.