Un error que se repite en muchos cazadores y que podemos ponerles remedio es el miedo al Scope Kiss, es decir, alejarnos demasiado del visor.
Este miedo suele producir que apartemos la cara del rifle, incluso que no encaremos bien y nos alejemos demasiado del visor, multiplicando el efecto paralax o el efecto túnel del visor.
Cerrar los ojos al disparar, seguramente por efecto del sobre-calibre y la falta de práctica, muchos cazadores cierran los ojos en el momento del disparo, incluso milésimas de segundo antes, perdiendo justo el foco en el momento culminante del lance.
El gatillazo, conocido como golpe de gatillo, una vez más, por miedo al efecto del retroceso, tendemos a prepararnos para el retroceso e incluso, de manera refleja, contrarrestar su efecto en el momento del disparo.
El gatillazo suele resultar en disparos bajos, o bien a izquierda, o bien a derecha en función de si se es zurdo o diestro.
Disparar demasiado rápido es un error que suele ser más común en los cazadores que utilizan rifles semiautomáticos, aunque no solo se da en estos casos.
No encontrar el objetivo en el visor puede provocar un fallo en el disparo.