¿Qué lleva dentro un silenciador?

1) Carcasa exterior: La carcasa exterior del silenciador suele ser cilíndrica y está hecha de acero u otro material duradero. Encierra los componentes internos del silenciador y brinda protección contra elementos externos y escombros de la carretera. 2) Tubos o tuberías perforados: Dentro del silenciador, hay uno o más tubos o tuberías perforados dispuestos longitudinalmente a lo largo del silenciador. 3) Deflectores o difusores: rodeando los tubos o tuberías perforados hay deflectores o difusores, que generalmente están hechos de acero u otro material que absorba el sonido. 4) Material insonorizante: el espacio entre la carcasa exterior y los tubos o tuberías perforados se rellena con material insonorizante, como fibra de vidrio, lana cerámica o lana de acero. 5) Resonadores: Algunos silenciadores cuentan con resonadores, que son cámaras o tubos adicionales diseñados para atenuar aún más frecuencias específicas del ruido del escape. 6) Tubos de entrada y salida: El silenciador tiene un tubo de entrada en un extremo y un tubo de salida en el otro extremo.

El silenciador de un tubo de escape, es un dispositivo que se conecta en línea con la salida de un sistema de escape. Su finalidad es disminuir el ruido que llega a la salida del mismo, reduciendo la presión ejercida por el flujo de los gases. Para ello cuenta con diferentes mecanismos, que pasan por canales de intermitencia, tubos resonadores, campos de refracción y difusión, y tazones de absorción de refuerzo. Por dentro, el silenciador se compone de una carcasa de metal resistente, generalmente con algunas soldaduras para un mayor ajuste y durabilidad. Esta carcasa suele ser fabricada de manera rectangular o cilíndrica y viene en una variedad de tamaños para ajustarse a la entrada y/o a la salida del sistema de escape del coche. Algunos modelos también incluyen una doble carcasa para mayor protección. En su interior hay un conjunto de conductos que forman canales para que los gases de escape pasen a través del silenciador. Estos pueden ser finos tubos, placas perforadas y enrollados en espiral. Algunos silenciadores también contienen receptores de resonancia, que contribuyen a la reducción de sonido. Generalmente, consisten en una malla metálica enrollada en espiral alrededor de uno o más tubos interruptores. Los silenciadores también incluyen tazones de absorción que reducen la cantidad de sonido que se escapa desde la abertura del silenciador.

La fibra de vidrio es un material ligero y duradero que se utiliza habitualmente por sus propiedades de absorción acústica. Puede atenuar eficazmente el ruido del escape absorbiendo y disipando las ondas sonoras a medida que pasan a través del silenciador. Algunos silenciadores de plástico pueden incorporar cámaras resonantes o cavidades llenas de materiales absorbentes del sonido. Estas cámaras están diseñadas para resonar en frecuencias específicas, reduciendo aún más los niveles de ruido al cancelar ciertas ondas sonoras. La espuma acústica, también conocida como espuma insonorizante, es otro material que se utiliza dentro de los silenciadores para absorber las ondas sonoras y minimizar el ruido. Es liviano, flexible y se le puede moldear para adaptarse a la estructura interna del silenciador para una reducción óptima del ruido. Además de la fibra de vidrio y la espuma acústica, los silenciadores de plástico también pueden utilizar materiales compuestos que combinan diferentes elementos para lograr una absorción acústica y una durabilidad superiores. Algunos silenciadores de plástico pueden presentar tubos perforados o deflectores dentro del cuerpo del silenciador. Estos tubos están diseñados para interrumpir y redirigir el flujo de escape, contribuyendo a la reducción del ruido al crear turbulencias y disipar la energía sonora.