Las reglas de seguridad del Coronel Jeff Cooper según el escenario
Hasta nuestros días, en el terreno militar, se instruye a las Pequeñas Unidades a apabullar con un gran volumen de fuego al enemigo durante un ataque convencional.
Un buen tirador primero debe ser un tirador seguro
Analizaremos en este artículo la cuarta de las reglas de seguridad del Coronel Jeff Cooper:Regla nº 4.
Identifique siempre su blanco y lo que hay más allá de él.
Las defensas suelen colocarse en profundidad.
De este modo que los proyectiles que pasan de largo a la primera línea de defensa quizá puedan hacer algún tipo de daño en las sucesivas.
Aquellos que no demuestran maestría en el manejo de las armas son elementos peligrosos, ya que en estos escenarios urbanos se cumple una máxima que debe tenerse muy en cuenta:
El proyectil que no impacta donde quiero, impacta donde no quiero.
Entrenamiento constante
Una vez más, un constante entrenamiento con las armas de servicio y la adecuada elección de la munición a emplear es la mejor solución al problema.
Identificar primero, disparar después
Del mismo modo, se hace necesario incluir en los entrenamientos la presencia de blancos no hostiles que obliguen al Operador a identificar su objetivo y a discernir entre el que es hostil y el que no.
Escenarios más peligrosos de lo que parece
Una vez hemos entrenado a nuestros hombres en su obligación de identificar a los blancos.
Es el momento de ir más allá con lo que hay detrás de él.
La mayoría de los proyectiles lanzados pueden, en función de en qué parte del cuerpo impacten, atravesar al sospechoso e impactar de nuevo tras él.
Esto nos lleva a que también debemos considerar el modificar la posición de tiro y elegir cuidadosamente el momento del disparo.
Haciendo que la trayectoria no coincida con aquellos lugares donde no quiero impactar.