Así es la vida, no quiero quitarle importancia, pero es muy complicado trasladar algo que hacemos bien en la práctica y sin presión a la acción en directo, bajo mucha presión.
He tenido jugadoras que, cuando quieren mejorar sus tiros, se pasan toda una semana practicándolos y se frustran si sigue sin salirles bien en el próximo partido.
No se trata solo de tus tiros, sino de todo lo que haces.
La repetición es lo que te permite actuar con precisión.
Repetition is also what will get you over one of the biggest obstacles every athlete faces: a lack of confidence.
No quiero quitarle importancia a lo horrible que es esa sensación en el momento, pero solemos ver nuestros fallos mucho peores de lo que son en realidad.
Mi entrenador de fútbol del instituto me enseñó una de las lecciones más importantes que he aprendido sobre esto en mi vida.
Cuando terminaba un partido y me sentía frustrada por cómo había jugado, me decía: "Nunca vas a hacer un partido perfecto.
Tu objetivo en el partido es rozar la perfección tantas veces como sea posible".
Alcanzar la perfección es imposible, pero puedes hacer un pase perfecto, un tiro perfecto o una jugada defensiva perfecta.
El verdadero cambio no ocurre de la noche a la mañana.
Mucha gente joven tiene esta visión distorsionada del crecimiento y el tiempo que se tarda en mejorar.
Para mejorar, tienes que hacer lo que yo hacía cuando jugaba: tocar la pelota y practicar todos los días.
Día tras día.
Encuentra la forma de crear tu espacio ideal para practicar, ya sea en casa o en un parque.
Te sorprenderás de lo mucho que puedes progresar en un mes.
Y en dos meses.
Y en tres.